La actriz Scarlett Johansson y el periodista francés Roman Dauriac, padres de la pequeña Rose (2), habrían tomado la decisión de poner fin a su matrimonio de dos años el verano pasado, como revelan ahora, fuentes cercanas a la expareja, que por el momento no ha querido pronunciarse sobre su separación.
Llevan haciendo vidas separadas desde el pasado verano, se ha limitado a confirmar un confidente al citado medio de comunicación.
No obstante, los rumores sobre una posible crisis entre ellos llevaban circulando desde el pasado sábado, cuando la conocida intérprete hizo acto de presencia en la marcha por las mujeres que tuvo lugar en Washington sin su anillo de casada.
La estrella de Hollywood y su ya exmarido iniciaron su romance en octubre de 2012 y, dos años después, pasaban por el altar para formalizar su relación. No obstante, con el paso del tiempo la relación no habría hecho otra cosa que debilitarse, en opinión del mismo informante, debido a la incompatibilidad de caracteres de ambos que habría terminado imponiéndose en su convivencia diaria.
Personas que conocen a la actriz bien, llevaban esperando esto desde hace ya varios meses. Romain y Scarlett no encajaban el uno con el otro porque no son iguales, o al menos su matrimonio siempre ha sido desequilibrado. Siempre sospechamos que algo iba mal entre ellos”, asegura un confidente.
La última aparición pública de Scarlett y Romain como pareja casada se produjo el pasado mes de octubre cuando ambos asistieron a un evento promocional en París (Francia), donde tenían fijada su residencia desde el nacimiento de su única hija, una ocasión en la que la estadounidense hizo gala una vez más de la simpatía y el entusiasmo que la caracterizan, al menos, fuera de su ámbito más íntimo.
CC
