Los buses de servicio urbano volverán a las calles desde el lunes, pero regirán medidas muy estrictas para evitar la propagación del coronavirus. La capacidad de pasajeros será regulada con el objetivo de hacer respetar el distanciamiento en el interior de las unidades.
La Empresa de Transporte Terrestre empezó un proceso de capacitación online a los conductores. El objetivo es prepararlos para el nuevo sistema, donde trabajarán con mascarillas, protectores faciales, gafas y demás elementos de bioseguridad.
Andrea Salazar, funcionaria de la entidad municipal, manifestó previamente se trabajó con los dirigentes de cada operadora y que se han armado grupos de 30 personas para impartir las charlas.
La desinfección de las unidades al finalizar cada vuelta será obligatoria, así como el uso de alcohol y gel antiséptico. Los profesionales del volante que superen los 60 años de edad y los que pertenezcan a grupos vulnerables no conducirán los buses, esto para salvaguardar su salud.
Cada unidad circulará máximo con el 30% de su capacidad. Actualmente se señalizan los asientos que pueden ser utilizados por el usuario y se prohíbe el traslado de personas paradas en los pasillos.
Iván Pallaroso, representante de Transmetro y del Consorcio Mío, manifestó que están listos para volver a las calles después de permanecer en inactividad desde el pasado 17 de marzo.
El dirigente detalló que en su compañía instalaron sistemas para desinfectar al pasajero, el mismo que lo activará el conductor a través de un botón. “Los choferes tendrán su propio sistema para que lo utilicen cuando lo crean necesario”.
