El gobierno de Ecuador, que ha eliminado subsidios de algunos combustibles, anunció el martes que mantendrá el precio del diésel, con lo que pretende apaciguar el descontento de transportistas.
El Ejecutivo «ratifica» que el precio del galón americano de diésel «para cualquier tipo de transporte» se mantendrá en $1,04, señaló la secretaría (ministerio) de Comunicación en una nota de prensa.
Agregó que tras la decisión, el sector transportista, con el cual se reunió el lunes, se comprometió a «retomar sus actividades con normalidad» en medio de amenazas de paralizaciones.
Transportistas amenazaban con suspender sus actividades ante el anuncio en diciembre de que aumentaría el precio del diésel -el combustible más utilizado en el país- desde enero.
La cartera de Comunicación divulgó el martes un decreto que precisa que el diésel para el sector automotriz seguirá en 1,04 dólares por galón.
Durante los últimos meses, la administración del presidente Lenín Moreno, que afronta problemas económicos, ha incrementado en 25% los precios de las gasolinas incluso liberando la cotización local del combustible de más alto octanaje, que es fijada según la del mercado internacional.
En ese marco, el galón de la gasolina super (92 octanos) llegó en diciembre a 3,10 dólares cuando en agosto pasado costaba 2,48.
Las alzas generaron débiles protestas de estudiantes, sindicatos y transportistas.
El gobierno sostiene que los subsidios a los combustibles significaron unos 50.000 millones de dólares para el Estado en la última década.
