El juicio político que podría terminar en la destitución del presidente de Chile, Sebastián Piñera, enfrenta este martes su última jornada en el Senado con una inédita votación que se podría extender hasta la madrugada del miércoles.
A las 09.00 horas (hora local), la Cámara Alta comenzó a analizar la acusación contra el gobernante, iniciada por supuestas irregularidades en la venta en Islas Vírgenes Británicas de un polémico proyecto minero al inicio de su primer mandato, un escándalo revelado en la investigación papeles de Pandora.
Durante la mañana, expondrán sus argumentos una terna de diputados que representa a la Cámara Baja, órgano que la pasada semana aprobó de forma histórica con los votos justo (78 de 155) que prosiguiera el juicio político, y posteriormente intervendrá el abogado de Piñera, Jorge Gálvez.
En la tarde se iniciará la votación final, en la que cada uno de los 47 senadores tendrá 15 minutos para argumentar, por lo que se prevé que la jornada pueda extenderse hasta entrada la madrugada de miércoles.
En la anterior sesión, que tuvo lugar en la Cámara Baja, los parlamentarios estuvieron alrededor de 22 horas en activo y sin grandes pausas, en parte por el filibusterismo promovido por un diputado opositor que habló durante 15 horas seguidas para defender el «impeachment».
Se trata del juicio político contra un presidente que más ha avanzado en la historia del país, aunque los expertos estiman que será complicado que sortee el Senado, donde necesita un quórum de dos tercios para prosperar y la oposición solo tiene 24 votos.
El origen de la acusación, impulsada por la oposición, se sitúa en las presuntas irregularidades en la compraventa de la Minera Dominga -de la que la familia Piñera era la principal accionista-, en Islas Vírgenes Británicas, apenas nueve meses después de que el mandatario asumiera el cargo en su primer periodo (2010-2014).
Según reveló el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ), el proyecto se vendió al empresario y amigo de la familia Carlos Alberto Délano por 152 millones de dólares, 138 de los cuales se concretaron en el paraíso fiscal.
El mandatario, una de las mayores fortunas de Chile, ha sostenido en sendas comparecencias públicas haberse desvinculado de sus negocios a través de fideicomisos ciegos en 2009 y que lo revelado en los papeles de Pandora ya fue investigado y sobreseído en 2017.
El juicio político transcurre durante los últimos meses de mandato de Piñera, que dejará en marzo el cargo, y apenas unos días antes de las presidenciales del 21 de noviembre, las elecciones más trascendentales e inciertas de la historia reciente del país.
Se trata del segundo intento de destituirle, tras la tentativa de noviembre de 2019 por presuntas violaciones a los derechos humanos en medio de las masivas protestas contra la desigualdad, las más graves desde el fin de la dictadura.