El ministro de Comercio Exterior, Pablo Campana, agitó las redes sociales este 23 de octubre del 2018, por la compra de un auto Maserati, por cerca de USD 187 000.


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El ministro de Comercio Exterior, Pablo Campana, agitó las redes sociales este 23 de octubre del 2018, por la compra de un auto Maserati, por cerca de USD 187 000.

En la mañana del martes, el exsindicalista Fernando Villavicencio publicó en Twitter un mensaje dirigido al presidente de la República, Lenín Moreno, en el cual dijo:

“su ministro Pablo Campana acaba de comprarse un Maserati del año en $189 mil dólares al contado y paga $ 22 de matrícula. No le parece ofensivo que esto haga un ministro en un país empobrecido y saqueado?”

Villavicencio adjuntó documentos de la compra y eso generó una avalancha de comentarios a favor y en contra. En la tarde del mismo día, el Ministro publicó un comunicado señalando que sí adquirió el vehículo y que era un regalo para su esposa.

Aclaró que no pagó todo de contado. La mayor parte del valor fue con un crédito bancario. También negó que el valor de la matrícula haya sido de USD 22. “… decir eso es ridículo, ese valor se refiere solo a la especie; el valor total de la matrícula es USD 2 598, solo por lo que resta del 2018”.

El comunicado del Ministro generó un nuevo debate en Twitter. Por un lado estaban quienes no veían ningún problema en que un ecuatoriano haga con su dinero lo que quiera, siempre y cuando ese dinero haya tenido un origen lícito.

En otro lado estaban quienes cuestionaron que la compra del auto se haya realizado a través de la empresa de Campana, la inmobiliaria Millenium, porque de esta forma se pagaría menos impuestos al Fisco y también menos utilidades a los trabajadores de la inmobililaria.

Campana señaló que USD 67 312,60 pagó en efectivo, de la cuenta de su empresa inmobiliaria, “legalmente constituida, con varios fideicomisos inmobiliarios que garantizan el buen manejo del dinero que genera”.

El pago de la matrícula del vehículo lo hizo el 15 de octubre pasado, a través del Banco Pacífico. En el comprobante aparece como propietario del vehículo Millenium S.A. Según el portal de la Superintendencia de Compañías, la inmobiliaria fue constituida en el 2007 y opera en Guayaquil, frente al Mall del Sol.

Está dedicada a prestar servicios de    proyectos inmobiliarios y actividades afines. Tiene un capital suscrito por USD 382 304. Lo que despertó más de un comentario en las redes sociales fue el crédito para cancelar la diferencia del valor del Maserati.

El Ministro dijo que el saldo del auto lo pagó con un crédito bancario por USD 120 000, cuya tasa de interés es del 9,76%. Esa tasa de interés se otorga a las empresas y por eso se trata de un crédito corporativo, que se utiliza para adquirir maquinaria, equipos, insumos o también como capital de trabajo de las compañías.

Cuando las personas naturales compran vehículos a crédito deben pagar una tasa de interés superior, conocida como de consumo, que actualmente bordea el 16% y se aplica en las tarjetas de crédito.

Pero además de la tasa de interés, el tema que generó mayor debate fue el uso del vehículo como un escudo fiscal, ya que permite elevar los gastos de las empresas, producto de la amortización o depreciación del auto, lo cual reduce la utilidad sobre la cual se pagar el impuesto a la renta al Servicio de Rentas Internas (SRI).

La Ley de Régimen Tributario señala que son deducibles los gastos relacionados con la adquisición, uso o propiedad de los “vehículos utilizados en el ejercicio de la actividad económica generadora de la renta”. Y la ley pone como ejemplo la depreciación o la amortización del vehículo.

Los tuiteros se preguntaron si un Maserati es necesario para el funcionamiento de la inmobiliaria. Pese a ello, Campana señaló que Millenium es una empresa solvente que aporta de forma legal al Ecuador.

“Solo uno de nuestros fideicomisos, Constitución, en 2016, declaró por impuesto a la renta (entre retenciones y pago al SRI) USD 181 025,55; en 2017 la declaración fue de USD 434 837,86”. El Ministro también adjuntó su declaración juramentada, en la cual destacó que es “un empresario privado que ha dado trabajo a miles de personas en los últimos 20 años”.

Según la declaración juramentada, los activos del Ministro suman USD 5,2 millones y los pasivos 1,3 millones, lo que le deja un patrimonio de USD 3,9 millones.

 


Con información de El Comercio







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